La idea me surgió cuando mi abuela me entregó un caja vacía de madera. Me venía la mar de bien para guardar cosillas pero había un problema: la caja era de cigarrillos y no me gustaba que la marca fuera visible. Así que pensé en mil forma de decorarlo y surgió lo del mosaico. Es realmente sencillo de hacer.
Procedimiento:
Paso 1: Dibujar a lápiz el diseño deseado en la caja.
Paso 2: Recortar a trocitos muy pequeños goma eva de los diferentes colores que queremos que decoren nuestro dibujo.
Paso 3: Cubrir de cola blanca la superficie de la caja y pegar los trozos en ella, amoldándolos para que no quede ningún hueco y presionar con los dedos suavemente para que queden más adheridos a la madera.
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